6.- La caída de la hoja

Mira que me lo habían dicho, y no una sino dos veces, pero como el tiempo pasaba y yo no sentía nada al respecto, llegué a tener la esperanza de que no me iba a pasar. No a todo el mundo le cae, me dijeron algunos, pero los médicos rara vez se equivocan. Pues ayer estaba dando un paseo, me rasqué la cabeza y me quedé con unos cuantos pelos en la mano. Dios mío! Oh My God! (que para eso estoy estudiando inglés), con lo presumido que soy y me voy a quedar calvo. Enseguida me obsesioné, necesito una gorra, un sombreo, que tal un pañuelo pirata, o sin nada, dudas y mas dudas. La mujer dijo que una gorra de Pinturas Proa no estaría mal, las hijas que mejor un sombrero tipo Indiana Jones, y algún amigo que vaya desnudo, de cabeza se entiende. En fin, hoy ya no estoy muy preocupado, hasta creo que vuelve a salir con mas fuerza, así que no me importa demasiado, tal vez sea lo que menos me importa de todo esto. Pero me siento bien escribiendo y riéndome de mi mismo.

Un poco de música para pasar la tarde.